Durante el compostaje que hay un incremento de temperatura importante fruto de la degradación de la materia orgánica. Es debido a la acción de los microorganismos presentes en las pilas y es uno de los síntomas que podemos observar para comprobar que el compostaje funciona bien. Este fenómeno se puede aprovechar en lugares frios y durante el invierno como método de calefacción. El calor generado se puede usar ya sea para calentar a los propios animales de las granjas como ya vimos anteriormente o incluso para calefacción de invernaderos y edificios o generar agua caliente.
Hay algunas entradas relacionadas con el tema publicadas en Compostando Ciencia por si queréis profundizar:
Compostaje para calentar agua
El uso para calefacción en edificios me resulta muy interesante. Con los frios típicos de la navidad que tenemos actualmente (al menos en el hemisferio norte) que me han generado un tremendo resfriado y el enorme coste económico y energético para la calefacción de nuestros hogares, la idea del compostaje como fuente de calor me parece encomiable, admirable e ingeniosa (observar a Ben Falk como se pega una ducha con agua calentita en la nieve…).
El compostaje dura todo el invierno y lo podemos aprovechar para generar agua caliente
Pensar que la fase termófila de una pila de compostaje puede durar entre dos y tres meses dependiendo del material que utilicemos (con una mezcla de estiércol y restos de poda al 50% puede ir bien). Con esto tendríamos para generar calor suficiente para calentar el agua sin ningún coste económico ni eléctrico durante todo el invierno. Tendríamos agua caliente durante las 24 horas del día ¡a precio cero!
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